¿Hay humanidad en los microespacios promovidos por la necesidad de generar viviendas en urbes saturadas? Los diseñadores Karl Frederik Scholz y Michael Blutrich proponen un mobiliario multifuncional para satisfacer las necesidades espaciales de los apartamentos reducidos, sin olvidar los rituales de reunión social que ocurren al interior de ellos. Su nombre es Pile (pila), por el apilamiento de sus elementos. 

Una pequeña mesa de metal está hecha a mano, y cuenta con un agujero donde se pueden colocar la lámpara y otros elementos. La lámpara tiene una base de madera hueca con tres cortes que permiten girar la lámpara en tres posiciones. La barra que la sostiene es un tubo de metal con iluminación LED, mientras que el tapete está integrado por 16 módulos de espuma de alta densidad, con un tamaño de 50×50 cm cada uno. Además, un conjunto de almohadas sirven a los usuarios para recostarse o como asientos.