Mala idea: escuchar música mientras se anda en bicicleta. ¿Cómo satisfacer la necesidad melódica de los ciclistas sin sacrificar la seguridad? La diseñadora Gemma Roper —otra graduada del Royal College of Art que da de qué hablar— ha creado unos audífonos que permiten al usuario escuchar música sin dejar de estar al tanto del ruido producido por los vehículos a su alrededor. 

El dispositivo funciona así porque las bocinas no son insertadas al interior de los oídos. En cambio, el diseño las coloca a la altura de los pómulos, permitiendo al ciclista escuchar dos niveles auditivos: la calle en nivel prioritario, y luego, la música. La tecnología de los auriculares es de conducción ósea; para comprenderlo mejor, Roper aclaró en una entrevista: “yo lo compararía con estar en un cuarto donde la música está sonando a través de una bocina.”

—
[8 de julio de 2015]