La sinestesia es la sensación subjetiva, propia de un sentido, determinada por otra sensación que afecta a un sentido diferente. Es la asociación mental de la bossa nova con una tela suave al tacto, del olor del mar con un coctel de camarón y de las botas exageradamente picudas con el acelerado ritmo de la música tribal regiomontana.

Touch that taste! es el nuevo proyecto de la diseñadora textil polaca Martina Barbara Golik que relaciona sabores con formas de una serie de objetos.

Basándose en una gama de cinco sabores, Golik ha creado cinco piezas de distintos materiales, formas y colores. Cada pieza traduce los sabores al plano de lo objetual, de manera que el usuario experimentará con el tacto lo que  percibe con el paladar.

El sabor dulce, por ejemplo, encuentra su forma física en un puf rosado que, seductoramente informe y suave, se aplasta progresivamente bajo el peso de la persona que se siente en él, creando una sensación de hundimiento.

El sabor ácido, por su parte, encarna una sábana hecha de tela de lana y hule líquido. Este envolvente pelaje contemporáneo de color gris con una pequeña mancha de amarillo parece tener un bello dinamismo al ser agitado, sacudido y portado.

Otros sabores responden a otras formas: lo amargo toma forma en un par de chanclas de espuma que pesan dos kilos cada una, lo salado en una suave cortina de diversas telas y colores y lo umami —sabroso, en japonés— se traduce en una alfombra con relieves para ser sentidos por nuestros pies.

El sabor umami no está entre los cuatro sabores reconocidos en Occidente y es bastante difícil describirlo (como sucede con cualquier otro sabor). La diseñadora hace posible palparlo con la alfombra umami. Como afirma Golik en su sitio web, es una colección que sólo cobra vida cuando es usada.

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[27 de mayo de 2015]