Hasta el 31 de agosto LABOR presentará la exposición colectiva Islas que se hunden. Curada por Vincent Normand, la muestra —que se complementará con un libro del mismo título— incluirá el trabajo de Katinka Bock, Etienne Chambaud, Hernán Díaz, Fabien Giraud, Karl Holmqvist, The Institute for Figuring y Nicholas Mangan.

Islas que se hunden se presenta como una metáfora de aquellos espacios que se quieren conocer o conquistar y, sin embargo, se pierden. Es la idea de estar solos en el mundo. Alejada de la opulencia, esta muestra conjunta una serie de gestos sin un origen específico; son más bien una serie de marcas negativas, como cortes, lapidaciones, medidas, ofuscamientos, confinamientos, caídas, insertos, costuras, collages y encuadernaciones.

A partir de una composición austera, las piezas muestran una gran tensión entre materia y significado, que a su vez se desdobla en el espacio de la escritura. Cada gesto se muestra como un intento de reinscribir el mundo a partir de la experiencia presente.

La interpretación de estas piezas radica en los detalles: los propios materiales, la relación con los títulos, la interpretación de los espectadores.  En la pieza The Blind Box de Etienne Chambaud (Francia, 1980) los límites del espacio se ven reflejados por los límites de los sentidos. En una pecera cuadrada coloca un par de peces tetra ciegos. Aislados tanto por sus sentidos como por su condición de no pertenecer al cardumen, estos peces nadan en un espacio un tanto solitario, alejados del océano.

Así mismo, a partir de una contraposición entre el mar y la superficie, las piezas de Katinka Bock (Alemania, 1976) Atlantic corners (2011) y Terrassenlandschaft (2009), establecen relaciones directas con el cuerpo y el paisaje, como pequeños espacios que contienen en el cuerpo la inmensidad de lo conocido.

El artista Karl Holmqvist (Suecia, 1964) presenta el primer número de Face Hug, una publicación anual en la cual se presentan proyectos individuales de artistas interesados en el aspecto parasitario de la naturaleza. A partir de la idea alienígena de Riddley Scott se presenta la idea de llenar lo vacío con una identidad gráfica. En Leporello, Holqvist delinea la materialización del parásito a partir de un método de trabajo tomado de la técnica de corte de Brion Gysin, que funciona a partir de elementos visuales y textos apropiados y reacomodados en una secuencia. En la publicación también se presentan algunos de sus poemas.

Finalmente, la imagen de la exposición es la pieza de Nicholas Mangan, Matter Over Mined (2012), en la cual habla del comportamiento colectivo. La pieza constituye una metáfora de la relación entre la fuerza física y el poder del pensamiento reflejado en un libro.

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