El trabajo de Alexander McQueen siempre se caracterizó por conjugar brutalidad y estilismo, logrando construir una tradición —y transgresión— en la moda del siglo xxi. Cada una de las piezas de sus distintas colecciones expresaba los aspectos más profundos y oscuros de su imaginación, y ensamblaba un desafío a los estándares de la confección, además de ampliar los parámetros convencionales de la ropa que, según él, van más allá de la utilidad, pues se trata de una expresión de la cultura y la identidad de la mujer. Es así que la figura de McQueen, más que rebelde, se percibe como una visionaria subversión de la sastrería tradicional y las prácticas de corte y confección que integró al performance para crear un estilo propio.

Por esto, desde que en febrero de 2010 el prolífico diseñador perdió la vida, el Fashion System ha buscado rendir tributo a 19 años de creación. Ahora este deseo se ve materializado en un homenaje que ha causado el regocijo de muchos en la industria.

Desde el 4 de mayo, el Metropolitan Museum of Art de Nueva York presenta Savage Beauty, curada por Andrew Bolton. Se trata de una exposición que revisa el trabajo de Alexander a lo largo de toda su carrera, desde su colección de posgrado de 1992 hasta la que se presentó en el Fashion Week después de su muerte; una selección que ensambla una narrativa sofisticada sobre los icónicos diseños que constituyen la obra de uno de los artistas más influyentes e inspiradores de las pasarelas.

Del 4 de mayo al 31 de julio de 2011.
Metropolitan Museum of Art, Nueva York

www.metmuseum.org