En una sociedad obsesionada por la imagen, la moda es un enigma mediático que, salvo en casos excepcionales, solo muestra su superficie. Esto no es gratuito. Pierre Bourdieu señala en un capítulo de Sociedad y cultura dedicado a la alta costura que para ser periodista de moda, lo mejor es tomar distancia de los conceptos de la sociología de la moda. Siendo un objeto clave del imparable consumo del presente, la moda también se desdobla en la filosofía, el arte, el periodismo, la literatura y la política.

Código seleccionó a cinco teóricos contemporáneos que, desde afuera de la disciplina, han hecho aportaciones relevantes para la comprensión de los fenómenos de la moda. Los ordenamos alfabéticamente.

—Alison Lurie (Illinois, 1926)

Fotografía tomada de readMedia Newswire.

«Podemos mentir en el lenguaje del vestido o tratar de decir la verdad;
a menos que seamos desnudos y calvos, es imposible permanecer en silencio».
—Alison Lurie, El lenguaje de la moda.

¿Cómo se viste la gente, y por qué? La novelista ganadora del premio Pulitzer desentraña las posibles respuestas en El lenguaje de la moda (Paidós, 1994). Detrás de las decisiones ordinarias de los individuos al elegir su vestimenta hay un diálogo sostenido entre la moda y las sociedades. En el ensayo, Lurie examina el panorama de ropas e indumentarias y las decodifica a partir de gustos, profesiones, procedencias geográficas, deseos sexuales, entre otros aspectos de la vida cotidiana.

Alison Lurie, El lenguaje de la moda (1994).

—Eric Hobsbawm (Alejandría, 1917-Londres, 2012) 

Fotografía tomada de La Tercera.

«Si los diseñadores de moda más brillantes son, en ocasiones, los mejores predictores del futuro,
la responsabilidad del oficio no es menor».
—Eric Hobsbawm, Un tiempo de rupturas.

Reconocido historiador nacido en Alejandría, Hobsbawm centra su obra Un tiempo de rupturas (Planeta, 2013) en el cuestionamiento de la superestructura de la cultura y sociedad del siglo XXI, basada en la teoría marxista sobre la cultura, misma que repercute en sus obras anteriores como la revelación del hombre y su visión histórica en la actualidad. Pero, ¿en dónde tiene cabida la moda? Es curioso que uno de los grandes personajes de la historia del siglo XX haya encontrado una manera de hablar sobre esta disciplina, específicamente en este libro, donde confirma que ha sido una de las más influyentes para el entendimiento de los procesos culturales en relación con el poder, el conflicto y la alteración de la sociedad.

Eric Hobsbawm, Un tiempo de rupturas (2013)

—Gilles Lipovetsky (París, 1944)

Gilles Lipovetsky (Millau, Francia, 1944). Cortesía del autor.

«La moda no excluye la inteligencia, la libre iniciativa de los hombres,
la responsabilidad de la sociedad respecto a su propio porvenir».
—Gilles Lipovetsky, El imperio de lo efímero. La moda y su destino en las sociedades modernas.

Sociólogo y filósofo francés, es conocido por sus reflexiones sobre la posmodernidad. En El imperio de lo efímero. La moda y su destino en las sociedades modernas (Anagrama, 2013), el autor propone una provocativa tesis: la moda aparece como un instrumento democratizante de las sociedades liberales. La moda es más que un lujo; se trata de un elemento central.

Gilles Lipovetsky, El imperio de lo efímero (1990)

—Judith Butler (Cleveland, 1956)

Foto tomada de http://radio.uabc.mx/

«[…] uno que va al guardarropa de género y decide su liberación con el género que usará hoy».
—Judith Butler, El género en disputa.

En un momento en el que la industria aplaude la moda de género neutro (J.W. Anderson, Shayne Oliver) la filósofa tiene algo qué decir sobre la identidad, elemento cuya percepción se encuentra en mutación por las modas. En El género en disputa. El feminismo y la subversión de la identidad (Paidós Ibérica, 1990) explora los límites impuestos por el discurso masculino y femenino. Para la autora, la identidad de género lleva consigo un performance realizado por los sujetos. Y la moda es uno de sus artilugios.

Judith Butler, El género en disputa (1990).

—Pierre Bourdieu (Denguin, 1930-París, 2002)

Fotografía tomada de Goodreads.

«Pienso que una revolución específica, algo que hace época en un campo determinado,
es la sincronización de una revolución interna y de algo que ocurre fuera, en el universo que la rodea».
Sociología y cultura (1984)

¿Puede un diseñador emergente cambiar las reglas del sistema de la moda? Sólo en el nombre de las mismas reglas. En el capítulo «Alta costura y alta cultura» de Sociología y cultura (Grijalbo, 1994), Bourdieu describe la estructura del campo de producción de la alta costura. Los dominantes —«aquellos cuya etiqueta tiene más precio»— (menciona a Chanel y Balmain) recurren a estrategias de conservación para seguir de pie frente al incesante cambio de la moda. Aquellos que ingresan a la recientemente a la Chambre Syndicale de la Haute Couture usan estrategias subversivas para destacar, como el discurso de la marca francesa Courrèges que revolucionó a la moda de la época: «Ya no habla de moda, sino de la mujer moderna que debe ser libre…»

Pierre Bourdieu, Sociología y cultura, 1994.