Cuando el arte explora los territorios de la ciencia, los resultados pueden rebasar la mera aventura conceptual. Cuando los principios de la ciencia son analizados desde posiciones artísticas pueden generar obras que inauguren nuevas reflexiones sobre la convivencia del hombre con el mundo.

El argentino Tomás Saraceno es conocido por sus instalaciones a gran escala donde el principal elemento es el aire, como Cloud Cities, en la que se ofrece una alternativa para el desarrollo urbano con bajo impacto ambiental. La instalación consistía en una serie de grandes burbujas plásticas que contenían jardines y que podían albergar la presencia física de varios espectadores.

On space foam, curada por Andrea Lissoni y presentada en Hangar Bicocca en Italia, es una extensión del proyecto Cloud Cities. Basada en la arquitectura utópica contemporánea, esta instalación expresa el interés de Saraceno en la creación de ciudades aéreas autosuficientes y ecológicas. Con un gusto por la geometría ornamental y los espacios de gran extensión, Saraceno construyó On space foam en varios niveles climáticos. Se trata de una estructura de varias capas de PVC traslúcido suspendidas a 24 metros sobre el suelo. Cada membrana alberga una atmósfera distinta.

La instalación en conjunto se comporta como un ser vivo, ya que los pasos, el aliento y el sonido de la voz de los espectadores proveen de solidez a la construcción. La relación de codependencia que se entabla entre los visitantes y las capas de plástico —o entre los habitantes y la ciudad— provoca en ellos las más variadas reacciones: desde la sofocación y el miedo hasta un sentido de libertad, trabajo y responsabilidad, al saber que la estructura depende su interacción con ella.

On space foam puede ser considerada como una especie de estudio de la teoría de las cuerdas y de la física cuántica, ya que busca recrear formas y conceptos del ámbito subatómico, como los hoyos de gusano y los multiversos. En esta instalación convergen los estudios teóricos que Saraceno ha llevado a cabo en campos como la ingeniería, la física, la química, la aeronáutica y la ciencia de los materiales.

Saraceno continuará desarrollando el proyecto durante una residencia en el MIT. Su culminación se efectuará en las Malvinas, donde se pretende que On space foam se convierta en una biósfera flotante con capacidad habitacional, alimentada mediante paneles solares y agua salada hecha potable.

www.tomassaraceno.com