Para leer esta reseña, se recomienda escuchar tu disco favorito de Pink Floyd y disfrutar de una experiencia completa.

Hace nueve años Raf Simons (Neerpelt, Limburg, Bélgica, 1968) entabló  amistad con el artista americano multidisciplinario, Sterling Ruby (Bitburg, Alemania, 1972). Durante todo este tiempo, ambos han trabajado  por su cuenta en una investigación psicológica, cultural y, sobretodo, en sus propias vidas,  para dar lugar a una colaboración que va más allá de la simple relación entre la moda y el arte. Recientemente presentaron la colección masculina para la temporada Otoño-invierno 2014-15.

Entender el trabajo de Simons no es una tarea sencilla. Como cabeza creativa de Dior ha presentado campañas publicitarias y colecciones que albergan su visión particular, integrada por emociones, recuerdos y reflexiones. Las prendas que ha realizado al lado de Sterling Ruby parecen venir de un espacio íntimo, insospechado, y no corresponden a ninguna tendencia actual.

“Solía coser parches cuando era adolescente… Pink Floyd, Kraftwerk, Sonic Youth. Todavía los tengo en casa de mi madre,” comentó Raf después del desfile de la colección.

Por su parte, Ruby busca nuevas formas para plantear sus preguntas existenciales y reflejar sus vivencias a través de la experiencia artística. El creador vive y trabaja en Los Ángeles;  su trabajo  —que varía entre la escultura, la pintura, el video, el collage y la instalación— es un intento expresivo para enfrentar las diferentes formas de represión social.

El dúo logró, con esta colección, difuminar los límites entre las disciplinas de arte y moda. El lenguaje de la vestimenta es profundo, nostálgico, anticonformista y subversivo. En pasarela se vieron las esculturas a gran escala de Ruby, mientras que, al fondo, sonaba el tema Dark Side of the Moon. Las chaquetas largas fueron salpicadas con pintura y cloro; parches con diferentes palabras y símbolos fueron cosidos sobre la prenda, remanentes de la cultura punk de la década de los 70.

Father es una palabra constante en la colección; aparece en logos sobre playeras y abrigos de la serie. Sterling ha señalado que ésta remite a la autoridad e idiosincracia del hombre como se conoce en la cultura occidental. Por otro lado, la elección de materiales es refinada pero robusta al mismo tiempo, como un oxímoron materializado. Lanas cardadas, gabardinas pesadas y tejidos de punto grueso conviven con la expresiva paleta de color. Los cortes son perfectamente definidos y los salpicones de pintura adquieren protagonismo al evocar un do it yourself que grita de impecable artesanía. La actitud de los creadores se ha hecho visible, algo que invita a pensar que este trabajo podría tener una continuación.

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[19 de mayo de 2014]