En la década de los sesenta, momento de estallidos políticos a nivel global, algunos grupos pertenecientes a movimientos sociales, como el hippie y el punk, diseñaron sus propias estéticas autónomas del vestir. Entonces los diseñadores estuvieron atentos a su contexto, listos para reinterpretar estas propuestas en la pasarela —Yves Saint Laurent se apropió de la moda hippie en la década de los setenta, agregándole un toque elegante, mientras que Vivienne Westwood tuvo un importante acercamiento con los Sex Pistols, inaugurando el estilo punk.

¿Se trata este fenómeno de absorción de un acto frívolo y meramente comercial o podemos hablar, genuinamente, de una moda con intereses políticos? En la reciente Semana de la moda en París, Karl Lagerfeld montó una —falsa— protesta feminista protagonizada por sus modelos. Si su intención era polemizar, el ejercicio fue atinado: críticos de la moda y periodistas se alzaron para halagar o desaprobar el performance de la marca con prendas de precios elevados. Pero mientras la moda siga tejiendo las apariencias de los discursos ideológicos, la pregunta sigue en el aire. Código reúne cinco colecciones que han surgido de la interpretación de movimientos sociales.

1. Chanel, Primavera-verano 2015 — Feminismo

Coco Chanel, fundadora de la casa de moda, probablemente no lo supo, pero sus diseños alentaron un cambio en el vestir de la mujer que estarían relacionados indirectamente con el movimiento feminista. Ya lo dijo en algún momento “Las ropas deben seguir una lógica. Debe haber un hoyuelo para el botón, y debe funcionar. Los bolsillos deben ser reales”. Aunque parezca una obviedad, esto significaría entonces la revalorización de la ropa útil en el contexto de la alta costura. Y hoy Lagerfeld hace honor a ello a través del mencionado performance con intenciones feministas. Uniformadas de trajes masculinos en tweed, las modelos protestaban por algo —por una causa que tal vez no comprendían del todo. (Para un acercamiento de la moda al feminismo, véase este texto de Natalia López).

2. Walter van Beirendonck Otoño-invierno 2014 — Movimientos antirraciales

Van Beirendonck, diseñador perteneciente a los Seis ambéres (Dirk Bikkembergs, Ann Demeulemeester, Dries Van Noten, Dirk Van Saene), manifestó abiertamente su opinión en contra del racismo, complementando los atuendos de la colección de todos los colores —como si de banderas se tratase— con los penachos diseñados por Stephen Jones, portadores de la frase “Basta de racismo” (Stop Racism). Un mensaje frontal de parte de un diseñador celebrado por sus propuestas alternativas.

3.  Pam Hogg, Otoño-invierno 2014 — Pussy Riot

Una referencia marcada en apoyo al movimiento feminista, específicamente al colectivo ruso de punk feminista Pussy Riot, es lo que hizo Hogg para la temporada que viene este año. Se trata de un homenaje solicitado por el grupo Amnistía Internacional. Recientemente expresó a la revista Another Mag que aunque no se considera una persona políticamente activa, manifiesta sus posturas a través de su trabajo. La frase no sorprende: los diseñadores son intérpretes de su tiempo, y articulan, casi siempre sin saberlo bien, la reminiscencia de ciertos discursos ideológicos. En colores vivos y tejidos que aluden a los gorros característicos de las chicas Pussy Riot y referencias irónicas a los ostentosos vestuarios de la iglesia católica, la línea cerró con una frase: “Esta colección no está a la venta”.

4. Vivienne Westwood, Revolución climática, Primavera-verano 2013 — Movimientos ambientales

Aunque las prendas están inspiradas en los jardines reales británicos, forman parte de una campaña —ya lo dice su nombre— para promover la conciencia sobre el cambio climático y la necesidad de tomar acciones para contrarrestarlo. Westwood tiene una larga historia en el activismo a través de la moda; su manifiesto Resistencia activa ante la propaganda lo constata. Aunque la relación entre la línea y el tema político sea absurda, ¿acaso no lo son todas las colecciones que intentan apropiarse de esos asuntos? En pasarela, al momento de dar agradecimientos, Westwood portó una playera con la leyenda “Revolución climática”, invitando a los espectadores a no comprarla. Una ironía que sólo una diseñadora de su talla puede permitirse.

5. Lucía Cuba, Artículo 6, Narrativas de género, fortaleza y política (2012) —Derechos reproductivos

Quizá la propuesta de moda más cercana a convertirse en acción política de esta selección. Lucía Cuba (Lima, Perú, 1980) es una diseñadora de moda y científica social que se dio a conocer a nivel internacional en la Semana de la moda de Nueva York de 2012. Entonces presentó esta colección crítica respecto del Artículo 6 de la Constitución peruana. Éste señala que todas las personas tienen derecho a elegir el método anticonceptivo de su preferencia. El mismo texto se encuentra impreso en algunas de las prendas. Pero hay más: se trata de un proyecto multimedia, aún en curso, conformado por doce acciones desarrolladas a través de cine, instalaciones, sesiones de fotos, lecturas, talleres y performances.

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[3 de noviembre de 2014]