Las ciudades están llenas de no-lugares: sitios públicos de los cuales momentáneamente nos apropiamos, sólo para abandonarlos nuevamente al cabo de unos minutos. Un dúo de diseñadores polacos, Ania Rosinke y Maciej Chmara, idearon un proyecto para celebrar esos espacios que son, a un tiempo, propios y ajenos.

Se trata de una cocina móvil, con todo y comedor para diez personas. Ania y Maciej recorrieron la ciudad invitando a los transeúntes a sentarse a comer con ellos. La pieza, llamada Mobile Hospitality (hospitalidad móvil) es un comedor sobre ruedas, fabricado en madera de pino, que mantiene la estética DIY. Incluye una cocineta con estufa, un fregadero que recibe agua de un recipiente rellenable —y que incentiva, así, el uso consciente del agua— y hasta macetas para cultivar especias. De un costado sobresale un secador de platos y en la parte superior, un trapecio hace las veces de perchero para utensilios de cocina. Al momento de guardarse, las 10 sillas se integran perfectamente con la estructura. El mueble completo es móvil y puede plegarse para contener todos los aditamentos que necesita. Es cuestión de decidir el lugar y el platillo y ¡listo!, tenemos una experiencia culinaria diferente a la acostumbrada.

La intención de los diseñadores es destacar que el espacio público de las ciudades no es solamente un telón de fondo para nuestras actividades diarias, sino que puede ser un sitio de encuentro del cual todos somos responsables —además, por supuesto, de comunicar de forma muy simple la sensualidad y el goce de la cultura gastronómica.

El mueble está diseñado para ser utilizado de manera comercial o personal. Ya sea que ofrezcas el servicio de proveer alimentos en las calles, que quieras tenerlo en tu jardín o utilizarlo para cualquier idea que involucre una cocina en un lugar inusual, Mobile Hospitality está ahí para solucionarlo. Además, su precio no es elevado y es altamente funcional.

El proyecto se presentó a modo de happening en 2011; en 2012 ganó el premio del Festival Internacional de Diseño DMY, el premio NWW 2012 y el premio al diseño experimental otorgado por el ministerio austriaco. También se presentó en el Salón del Mueble en 2013.

Ania Rosinke y Maciej Chmara se conocieron mientras estudiaban arquitectura y diseño en la Academy of Fine Arts en Gdansk, Polonia. Se dieron cuenta que compartían la misma pasión por el arte y el diseño, la cual los llevó a colaborar juntos y finalmente montar su estudio en Viena. La mayoría de sus proyectos han sido inspirados por aspectos funcionales y culturales.

Sus productos privilegian la belleza, la practicidad y sobre todo la simplicidad. Sin ser ostentosas, sus soluciones para necesidades cotidianas toman en consideración aspectos como la empatía de los espacios compartidos, la movilidad y la sustentabilidad. El comedor ambulante, por ejemplo, responde a una necesidad básica y es similar a muchos otros proyectos, pero los polacos decidieron retomar la idea y construir toda una visión con ella. De eso se trata, muchas veces, el buen diseño, ¿no? El enfoque es la convivencia humana, el placer de pasar un buen rato disfrutando de las cosas más simples, como el compartir los alimentos y charlar en libertad. Mobile Hospitality es una opción segura, práctica, espontánea y responsable con la ecología. La belleza, parecen decir Ania y Maciej, se encuentra en lo simple.

chmararosinke.com

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[3 de abril de 2014]