Ubicado en el parque El Palomar de Chihuahua, el Gimnasio adaptado del despacho mexicano Urbánika alberga una cancha multiusos que puede ser usada para diversos deportes, como basquetbol, boleibol, boccia, goalball y quad rugby, además de un salón de uso múltiple y un espacio para servicios alternativos. Un espacio incluyente construido a partir de los principios de sostenibilidad.

A un año de su inauguración, la estructura está rodeada por un circuito de mapas, señalización especial y espacios abiertos, y se ha convertido en uno de los pioneros en el país en ofrecer actividades deportivas y culturales para personas con discapacidad.

Mientras el acceso destaca por su vibrante color amarillo, los pasillos, escaleras y andadores se relacionan con el exterior para guiar a los usuarios con iluminación natural. El gimnasio también representa una promesa: convertirse en un edificio que se pierda entre los árboles plantados al inicio de su construcción, reemplazando una gran pérdida ocasionada por las heladas de la ciudad.