Funciones de una variable es el nombre de la nueva exhibición que presenta el Museo Tamayo sobre la retrospectiva de 30 años del trabajo de la artista brasileña Jac Leirner, reconocida por ser una de las exponentes del arte contemporáneo más relevantes de América Latina.

Leirner (São Paulo, 1961) crea circuitos y sistemas mediante la reorganización y clasificación de objetos cotidianos —remanentes de la cultura de consumo— como son cajetillas de cigarro, tarjetas de presentación o bolsas de plástico, otorgándoles nuevos significados, valores y usos. Al mismo tiempo los transforma en formas esculturales que ofrecen múltiples lecturas y reflexiones.

En esta muestra predominan temas como son la seriación, la repetición, la circulación y el consumo, así como su influencia del arte constructivo y minimalista.

Aprovechamos su visita a México para aproximarnos a su trabajo:

 En tu obra, el hecho de coleccionar, organizar y ensamblar suele tomarse como un comentario sobre el consumismo de las sociedades contemporáneas, pero también son acciones que son propias del ser humano —no desde una perspectiva consumista— en su necesidad de expresarse o relacionarse. En este sentido, ¿se puede decir que en tus piezas existe una manifestación de la esencia del ser humano? Y si la hay, ¿en qué sentido?

 La pregunta hace mucho sentido porque realmente refleja lo que todos nosotros estamos acostumbrados a vivir en nuestras vidas.  Los materiales que uso son aquellos que todo el mundo tiene en su bolsillo, casa o en la oficina.

Por el otro lado, con mi trabajo yo no quiero hacer un comentario relacionado con el consumismo, la economía, el crimen o alguno de estos grandes issues. No dudo que estos temas sean importantes para todos nosotros, pero la única intención con mi trabajo y lo que hago con todas estas situaciones, es hacer arte. Por lo tanto, no plasmo mis comentarios en mi arte.

Por ejemplo, cuando uso dinero en mi trabajo, no estoy hablando de economía, sino uso el significado de la palabra como tal; en otras palabras, no interactúo con ésta, simplemente la planteo como arte.

Para mí, el arte es la continuación de lo que el hombre ha hecho desde el inicio. Es la necesidad de plasmar cosas y dar un nueva forma a las cosas y materiales; tiene que ver con el sitio, la belleza y la cobertura de la historia. El arte nunca mejora: para mí existe porque es el arte en sí mismo. Por supuesto que refleja tiempos, es parte de un conjunto, así que yo estoy aquí porque otros más estuvieron aquí anteriormente.

El arte tiene que ver con reflejar y reunir diferentes situaciones e historias.

¿Y con respecto al tiempo? Hay una condensación de “diferentes momentos”, o una narrativa abstracta (en tanto no nos proyecta el cómo o porqué llegó ese objeto a ti) de tu tiempo

 Para mí, el tiempo no es muy importante, pero para mi trabajo sí lo es. Lo veo como uno de los materiales con los que trabajo, porque cada una de mis obras toma bastante tiempo para ser desarrollada y para adquirir el material necesario.

Lo que yo trato es tener presente el tiempo que me llevará el trabajo, gracias a esto tengo que lidiar con muchas cosas conforme va pasando el tiempo. Tiene que ver también con paciencia, dar tiempo para que el trabajo se desarrolle solo.

Por ejemplo, esta exhibición habla acerca de 30 años de mi trabajo. Todos me llevan bastante tiempo, 15 años, 5, 20. Realmente toman mucho tiempo para ser realizados. Aunque no tengo prisa por terminar mi trabajo, dedico mucho tiempo a prepararlo.

¿Existe una distancia entre la vida cotidiana y tu arte (o el arte en general)? Es decir, tus instalaciones y esculturas están realizadas con objetos extraídos del acontecer cotidiano que al entrar a la dinámica del arte no pueden ser considerados como un tipo de readymade, por ejemplo. ¿Cómo observas esto?

 Sí, porque la vida cotidiana es una cosa y el arte es otra cosa. Por supuesto, el arte refleja nuestras vidas, porque los materiales que yo uso son parte de nuestras vidas, pero arte es más arte específicamente si refleja nuestras vidas.

Trabajo mucho, pienso en el arte muchas veces al día;  en mi vida diaria: si estoy desayunando, yendo al cine, trabajando en el estudio… Mantengo mi ser pensando en el trabajo.

Puedo decir que mi trabajo es constituido en un 90% de pensamiento y un solo 10% en realizarlo, manejar los materiales y construirlo.

Me entrego realmente de tiempo completo, aún en vacaciones o fines de semana. Pienso en mi trabajo o en el de mis colegas, así como en historia o el idioma; si estoy viendo una película o escuchando una melodía o una banda, reflejo ese lenguaje y todo esto se ve en el resultado de mi trabajo.

Desafortunadamente, mi arte refleja mucho de mi ser. Yo no quiero hablar de mí; sin embargo, creo que el trabajo lo hace. Prefiero hablar de artistas que adoro y admiro, maestros, gente que ya no vive pero que fueron grandes maestros. Es por ellos por quienes hago el trabajo y trato de seguir sus argumentos.

Con respecto a esta pregunta, ¿en tu obra hay presentación de objetos o representación de conceptos (economía, historia, consumismo)?, ¿cómo observas estas dos nociones que han marcado a la historia del arte?

 Son grandes temas que se reflejan a través del arte y es increíble poder ver la historia del hombre siendo expresada a través del arte, pero pienso que el arte tiene una situación específica. Está absolutamente separada o desconectada de situaciones sociológicas, económicas o antropológicas; pero cada uno puede entenderla en su propia manera.

Alguien puede verla a través de todos estos grandes tópicos de la humanidad, como son los aspectos sociológicos por ejemplo, y eso es aceptable porque es otra forma de mirarla. Pero mi manera es bastante diferente, yo veo al arte por sí misma. Tengo que aceptar que todas estas problemáticas son parte de mi trabajo, pero no es que yo quiera o busque reflejarlas, sino que únicamente pretendo hacer arte.

La gente dice que hay arte en el sexo, la política, el feminismo o la tecnología; siempre vinculan estos temas con el arte y creo que esto lo reduce a otra cosa. Éstas son grandes problemáticas y los tenemos que respetar como lo que son, pero el arte también es un gran issue al que se le debe dar su lugar.

Muchos artistas toman estos temas como arte puesto que tienen presente estos temas; los piensan y usan el arte para presentarlos en esa forma.  Muchas veces logran un gran trabajo, pero la mayoría de veces está relacionado a otra cosa que no es arte.

Usando la estética, muchas cosas lucen como arte, pero no lo son en realidad.

 También hay lecturas que relacionan tu trabajo con el conceptualismo y el minimalismo, sobre todo por las referencias a Cildo Meireles, Waltercio Caldas o Donald Judd, por mencionar algunos. Tus obras tienen referentes otras obras y/o tu arte tiene referente en el arte mismo. ¿Cómo defines tu ejercicio artístico? y/o ¿cómo concibes tu arte o la lectura que realizas del arte?

 Yo sólo hago arte porque el arte ya estaba antes de que la hiciera. Yo solo trabajo por y para eso. Por esta razón mi arte existe, pues refleja lo que he hecho, como minimalismo, pop art o dada al principio de siglo. Estos momentos en la historia tocan realmente mi manera de pensar y esto se ve reflejado en mi trabajo. Tanto el conceptualismo como el minimalismo están presentes en mi pensamiento.  Soy resultado de ambos.

Cuéntanos sobre esta exposición. Se trata de la primera presentación de tu trabajo en México, ¿qué narrativas se desarrollan en la muestra?

 Julieta González es la curadora de esta exhibición y ella hizo una gran búsqueda de mi trabajo. Ella empezó desde mis primeros trabajos con poemas en donde usé la máquina de escribir, ya con este sentido de cantidades, repeticiones con las palabras, con los símbolos, con los números y con matemáticas, las cuales están muy presentes en mi trabajo.

Ella también pensó en situaciones paradójicas en el trabajo, la manera en la que trabajo con los materiales. Su intención es reunir todas estas diferentes cualidades de mi trabajo.

Lo que presento es la obra de mis últimos 30 años, exhibidos en este maravilloso museo, que tiene una arquitectura fascinante. Para mí es un honor estar aquí y presentar una colección que apenas está comenzando, que es lo más reciente que tengo. Estoy exhibiendo más de 60 obras, desde las más pequeñas hasta las más grandes.

¿Y con respecto al título? Funciones de una variable es un título muy sugerente, alude a cuestiones matemáticas (o incluso científicas) pero también a “un” sistema y sus múltiples vías de acción. ¿Qué nos puedes decir al respecto?

Es un verso de uno de mis poemas que está en la exhibición y es un poema que está ligado a muchas categorías matemáticas, así como el mismo trabajo está relacionado con las matemáticas y la ciencia. Todas las obras tienen un discurso matemático y científico.

Finalmente, ¿cuáles son tus proyectos futuros?

 Trabajar muy duro, aunque pienso dejarlo por un tiempo porque es bueno descansar un poco, pero es obvio que siempre estoy pensando en ello, en trabajar y hacer arte increíble; pensar en mis adorados maestros y ver a las nuevas generaciones que vienen con tanta fuerza y poder.

Al mismo tiempo quiero ver al “circo” del arte convirtiéndose en algo más serio y menos como un mercado. Este “circo” está convirtiéndose en algo muy poderoso y la poética está perdiendo su lugar.

La inauguración oficial de la muestra se llevó a cabo el pasado 30 de abril. Previo a este evento se realizó la presentación del libro Jac Leirner en conversación con Adele Nelson, registro de las charlas entre la artista y la historiadora de arte brasileña, acerca del proceso creativo de Leirner.

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[12 de mayo de 2014]