El pasado 22 de junio el artista urbano conocido como Seher One (David Piñón Hernández) presentó un mural realizado en colaboración con Comex y Nike, como parte de la campaña Atrévete a crear.

Ubicado en la cancha de futbol del Centro Urbano Presidente Alemán, en la ciudad de México, la obra está inspirada en el deporte más popular del mundo: el futbol.

Código platicó con Seher One a propósito de este proyecto que se caracteriza por ser el más largo que ha hecho hasta la fecha.

¿Cómo surgió la invitación para hacer este mural?

Se trata de una campaña global de Nike que se llama Atrévete a crear. Yo tengo muy buena relación con ellos y con Comex, así que les presenté el proyecto y les pareció buenísimo. Ambos estuvieron de acuerdo con la colaboración. La gente de diseño gráfico de Nike me comentó que no querían manchar el muro, así que sólo decidimos poner los logotipos de ambos en las esquinas.

¿Cuál es el concepto y el proceso creativo detrás del mural?

Atrévete a crear es una campaña en torno al futbol que se lanzó a nivel Latinoamérica a propósito del campeonato de la Copa América. Pero esta iniciativa no está enfocada en el futbol profesional, sino todo lo contrario: busca rescatar a la gente que juega futbol de calle, en las canchitas de barrio. Y aquí [en el Centro Urbano Presidente Alemán] hay un centro muy grande donde se práctica ese deporte. Así, decidimos pintar un muro con un corazón en forma de balón. A partir de eso, yo era libre de proponer lo que yo quisiera. Decidí hacer un gráfico que busca reflejar toda esta idea.

Para mí, la creatividad nunca parte de cosas figurativas, sino de aspectos más abstractos que van tomando forma poco a poco. A veces quiero crear algo y pasan tres, cuatro o cinco días y no sucede nada. Pero, de repente, un día se te prende el foco y [la idea] ya está.

El mural parece proyectar un movimiento abstracto que incluso se puede relacionar con la dinámica del futbol.

Realmente todo mi trabajo esta sustentado en el movimiento, que es uno de los conceptos que más me inspiran. Trato de reflejar el movimiento, de capturarlo y simularlo. Quizás este mural es un poco grande para poderlo ver bien, pero hay que observarlo en una fotografía para poder tener una lectura de un solo impacto. Aunque tuvimos poco tiempo para realizarlo, estoy contento con el resultado, me gusta bastante. Además, los vecinos lo han agradecido mucho. En realidad, el muro iba a ser temporal y al final decidieron que fuera permanente; lo van a barnizar y poner una placa.

¿Cuánto tiempo te tardaste en hacerlo?

Trabajamos durante 10 días.

¿Estudiaste el espacio para realizarlo?

No, hubiera sido imposible, tenía muy poco tiempo. Vine una vez, tomé una fotografía y a partir de eso hice un boceto tratando de adaptarme a la escala, para saber perfectamente cómo iba a ser la composición y que no me faltara ni me sobrara espacio.

¿Qué tipo de pintura y colores utilizaste?

El 95 por ciento es pintura vinílica de Comex. En esta ocasión no tenía un límite de colores, así que decidí crear y colorear una versión digital para después tratar de emular con los colores de Comex lo que estaba viendo en la computadora.

¿Cuál ha sido la respuesta de los vecinos de la Unidad?

Cuando llegué pensé que iba a ser un poco complicado. Yo sabía que había un acuerdo entre la marca y la gente de aquí, pero tampoco quería que fuera una imposición. Pensaba que la gente que se acercara tal vez podría sentirse ofendida o agredida, porque de alguna forma estábamos invadiendo su espacio. Pero no, sucedió todo lo contrario. Nos recibieron muy bien, todos los días había un montón de gente tomando fotos del proceso. de cierta manera nos prestaron el espacio para que pudiéramos trabajar y terminar rápido, porque en este lugar los vecinos juegan futbol o frontón, entrenan americano o hay niños que practican karate.

¿Qué fue lo que más te gustó de trabajar con Nike y Comex en este espacio?

Lo que más disfruto es la ejecución, independientemente de los resultados. Yo sé que para que esto resulte, hay que estar pegado durante horas hasta lograr que tome forma. Pero lo que más se disfruta es el proceso mismo, de reconocer hacia dónde estás encaminando la composición y notar que poco a poco las cosas van tomando forma. Una vez terminado, me siento, lo veo, tomo un par de fotografías y al que sigue.

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[26 de junio de 2015]