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Exposición colectiva El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla… (2017), en el Museo Experimental El Eco. Vista de instalación. Cortesía del Museo Experimental el Eco.

«El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla…» en el Museo Experimental El Eco

Destacado 06.12.2017

Nydia Valerio

En esta exposición se revisa el concepto de «arquitectura emocional» a partir del intercambio epistolar entre Mathias Goeritz e Yves Klein.

A mediados del siglo XX, Yves Klein y Mathias Goeritz intercambiaron una serie de cartas en las que compartían sus ideas sobre las formas y la monocromía. En 1952, Goeritz creó —junto con Daniel Mont— el Museo Experimental El Eco. Sin ser arquitecto, diseñó un edificio que obedece a reglas poéticas más que estructuralistas. Se basó en el Manifiesto de la Arquitectura Emocional que escribió en 1953 y en el cual afirma que «[la arquitectura] es un reflejo del estado espiritual del hombre en su tiempo»; la principal función de la estructura del edificio del museo es la emoción. En 1960, Klein creó el color IKB (International Klein Blue), un azul ultramar que utilizó para enmarcar espacios de sensibilidad inmaterial originados por el monocromo. A decir del artista francés «los cuadros son solamente “cenizas” de la obra»; es por ello que instaba a crear espacios e intervenir objetos para generar sensaciones y experiencias. Para él, el arte sólo podía suceder en el espacio como una experiencia.

Ambos creían en las experiencias estéticas por encima de piezas físicas como forma de hacer arte.

El Eco Mathias Goeritz. Cartas.

Exposición colectiva El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla… (2017). Cortesía del Museo Experimental el Eco.

Recurriendo y rescatando a estas coincidencias creativas y conceptuales en el tiempo, y tomando al problema cromático como sustancia poética, Claudia Fernández, Gonzalo Lebrija, Andrea Martínez, Yolanda Paulsen, Melanie Smith y Emanuel Tovar exploran la noción del campo de acción en la producción artística en la nueva exposición que presentan en el Museo Experimental El Eco.

La exposición El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla… toma su nombre de un texto de Yves Klein de 1952 en el que intenta definir su posición en el arte a partir de su exploración del fenómeno de lo visible y la afirmación del problema cromático en el arte como acontecimiento y territorio de acción. La muestra exhibida en El Eco no sólo se fundamenta en el intercambio epistolar entre Goeritz y Klein, sino que también propone un diálogo con la arquitectura del edificio, trayendo así a la conversación el concepto de «arquitectura emocional» ideado por Goeritz, trasfondo metafísico de su obra.

El Eco Mathias Goeritz. Cartas.

Exposición colectiva El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla… (2017). Cortesía del Museo Experimental el Eco.

Los artistas reunidos para este proyecto bajo la curaduría de Paola Santoscoy presentan diferentes piezas desde sus particulares trincheras estéticas: las fotografías de Andrea Martínez parten de una indagación sobre la luz y el paisaje, haciendo referencia directa al territorio mediante coordenadas que se tornan abstractas ante los cielos cambiantes que registra. Gonzalo Lebrija aporta el dorado mediante tres grandes paneles que suman una lectura más a esta ecuación: la del vuelo, a partir de «dobleces» que transitan hacia lo tridimensional y cuyas referencias son aviones de papel. Claudia Fernández ofrece un conjunto de casi trescientas piezas con las que explora las posibilidades de la pintura como emplazamiento en un espacio determinado del tiempo que refiere la vastedad de un universo interior y exterior. La voz de Melanie Smith funciona como una presencia femenina desde el bar del museo, introduciendo cuestiones de representación de orden político y literario en la conversación. Las esculturas de bronce de Yolanda Paulsen contribuyen con una «animalidad» al problema de la abstracción que trae a colación lecturas sobre el espacio y las formas de relación dentro de la arquitectura. Por último, Emanuel Tovar produce una reliquia a partir de una acción que podría leerse como un acto vandálico, regresando al espacio el color amarillo de la torre de El Eco que temporalmente cambió su color.

Esta exposición significa un diálogo entre las soluciones creativas que desde posiciones distintas encontraron Klein y Goeritz sobre el problema cromático, la arquitectura del museo y las prácticas artísticas actuales.

El día es azul, el silencio es verde, la vida es amarilla… estará abierta al público del 2 de diciembre de 2017 al 18 de febrero de 2018, en el Museo Experimental El Eco, en la Ciudad de México.

Nydia Valerio

Egresada de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional Autónoma de México. Ha colaborado en diversos medios digitales e impresos como reportera cultural y fotógrafa.

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