Amat Escalante (Barcelona, 1979) hace cine desde los 18 años, cuando grabó Los amarrados, su primer cortometraje, sin tener educación académica en la materia y con ayuda de una cámara que compró a los 15 años con el sueldo que ganaba en un restaurante de comida rápida.

Desde entonces, su trabajo ha pisado los más grandes festivales de cine. Sangre, su primer largometraje, ganó el premio FIPRESCI de Cannes en 2008. Cinco años más tarde, con Heli obtuvo el de mejor director en el mismo festival.

Entre sus trabajos también se encuentra El cura Nicolás Colgado, colaboración que realizó para Revolución (2010), proyecto en el que diez directores reflexionan alrededor del centenario de la Revolución Mexicana.

¿Qué querías ser cuando eras niño?
Actor.

¿Cuál es la principal virtud que encuentras en otra persona?
Honestidad.

¿Y defecto?
Proteger y/o justificar la injusticia.

¿A quién admiras?
Werner Herzog

¿A quién repudias?
Nadie tiene el honor aún.

¿Tienes algún artista preferido?
El pintor Óscar Escalante, mi padre.

¿Y escritor?
Thomas Mann

Menciona una canción que haya sido importante para tu obra o tu proceso creativo.
“The End” de The Doors.

 ¿Cuál es tu palabra favorita?
Garambullo.

¿En qué época te hubiera gustado vivir?
1900.

¿Qué haces en tu tiempo libre?
Si se puede, nada.

Sin darme cuenta.