Con la presente edición, Código cumple 15 intensos y emocionantes años. Mucho ha pasado desde enero de 2001, cuando dimos a conocer nuestra primera edición. La revista tenía poco más de 20 páginas, en formato
media carta. Entonces, México estrenaba democracia y se integraba con prisa a la economía del libre mercado. Al mismo tiempo, el mundo se obsesionaba con la seguridad y la vigilancia luego del 11 de septiembre, sin anticipar todavía la burbuja punto com. Se generaban profundos cambios al interior de las prácticas artísticas. Nuevos aires animaban a la comunidad creativa del país que, liberada de la crisis de identidad, buscaba entablar un diálogo con el mundo globalizado y el creciente circuito de galerías, museos, ferias y bienales internacionales.

Código estaba interesada en investigar, producir, difundir y discutir ideas sobre la creación y la condición contemporáneas, ocupando un espacio deshabitado en el México de principios del siglo XXI. Así, registró el cambio de actitudes de una nueva generación de creadores que impusieron en el país nuevas formas de producción, exhibición y circulación del arte y el diseño.

Con la intención de dar voz a los creadores, pensamos en constituirnos como un medio abierto que incluyera entrevistas, proyectos in situ y portafolios para propiciar un vínculo entre creadores y lectores. Código identificó la forma en que la escena local se articuló con el sistema global. De esta forma, a lo largo de 15 años ha registrado la relación entre las artes y el diseño con lo social, lo político y lo económico, ofreciendo diferentes miradas de la creación artística desde el México contemporáneo y operando como puente con el exterior al reunir a los creadores y los autores de diferentes geografías y disciplinas.

Para celebrar estos 15 años nos propusimos dar continuidad al ejercicio retrospectivo de la edición del 10 aniversario (que registró lo más sobresaliente ocurrido entre 2001 y 2010), pero tomando como punto de partida el año 2008, cuando la crisis modificó el contexto y, por consecuencia, el desarrollo de las prácticas del arte y el diseño, en donde la violencia, los movimientos migratorios, la relectura de la historia, la responsabilidad social y el medio ambiente son solamente algunas de las preocupaciones más visibles.

Para lograrlo, incluimos entrevistas, opiniones, ensayos y conversaciones que analizan los cambios acaecidos durante este agitado período, pero también una infografía que revela la espectacular creación artística que ha tenido lugar en el ámbito digital.

Desde un México que persiste como un dinámico centro de producción de arte y diseño, y movidos por la misma curiosidad de los primeros números, vemos hacia delante con la certeza de que el trabajo de los creadores seguirá reflejando las complejidades de nuestra sociedad. Formar parte de ese proceso nos motiva y emociona.

Ricardo Porrero
Director general