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La Chula Foro Móvil. Cortesía del espacio.

Arte y literatura en movimiento: 5 foros móviles

Lista 25.02.2015

Recuperamos algunas galerías, bibliotecas y talleres montados en foros móviles que ofrecen u ofrecieron una alternativa a la cultura en la Ciudad de México.

Existen propuestas que aprovechan la diversidad social y cultural de la Ciudad de México para generar encuentros creativos entre el público y el arte  y la literatura. Se tratan de galerías, bibliotecas y talleres montados en foros móviles para recorrer los territorios urbano y simbólico de la capital, ofreciendo dinámicas alternativas a los espacios culturales convencionales. Sus acciones son una forma de apropiación y resignificación de lo público. Para Martí Peran: «Allá dónde el urbanismo pretende codificar los comportamientos y ordenar la distribución del capital y de las mercancías, la irrupción de artefactos rodantes inyecta sobre ese mismo territorio situaciones y prácticas inesperadas que fracturan la estructura regular del espacio social».

Código recupera 5 foros móviles dedicados al arte y la literatura, que transitan alrededor de la compleja retícula de la ciudad de México.

 

La Chula Foro Móvil (2014-)

Sus siglas significan Comunicación Humana, Literatura y Arte. Se trata de un espacio itinerante y un experimento de descentralización cultural y tráfico de ideas. Su coordinador y promotor, el escritor Antonio Calera-Grobet, en colaboración con el cultur-bar Hostería La Bota, lo lleva por las calles de la ciudad para dar a conocer su mini biblioteca que, además, brinda servicio de cafetería.

Desde que comenzó a rodar en septiembre de 2014, La Chula adaptó una camioneta Volkswagen modelo 75 para dar vida a lo que ahora es un proyecto independiente que apuesta por la literatura. En este booktruck —anglicismo que han utilizado para describir el foro— se planean y organizan actividades culturales a lo largo de la Ciudad de México.

Según su propio fundador, La Chula «representa una posibilidad abierta sobre cuatro ruedas, que permite la creación de zonas temporalmente autónomas capaces de resignificar el espacio público». Así, el proyecto propone nuevas estrategias de atracción pública a la lectura.

Han participado en eventos como la FIL del Zócalo y el foro organizado por la iniciativa poética Ni Pena Ni Miedo, que reunió a cincuenta escritores en torno al tema de Ayotzinapa.

Puedes seguir sus actividades actuales en sus redes sociales. 

 

La Chula Foro Móvil. Cortesía del espacio.

 

—Ovnibus Roma (2014-)

Del acrónimo Objeto Versátil Narrativo e Interactivo, Ovnibus Roma se define como un proyecto de recuperación del entorno y de espacios públicos. Sus fundadores, Johan Graffman, Ana Noble y Rodrigo Cué, trabajan en conjunto con colectivos y artistas para desarrollar propuestas orientadas al fomento cultural, la lectura y la animación.

Fundado en 2014, surge con la visión de ser un espacio comunitario que responda de forma inmediata a la necesidad de proyectos plurales y ataque de manera creativa al desarrollo de la gentrificación. Así, el equipo de Ovnibus reconstruyó un autobús abandonado en la calle de Orizaba, en la colonia Roma Sur, para convertirlo en centro de sus operaciones. Aquí se llevan a cabo diferentes actividades divididas por áreas específicas: cine, filosofía, arte sonoro, literatura y radio comunitaria.

Puedes conocer su programación actual, siguiendo sus redes sociales.

 

Camión y biblioteca

Ovnibus Roma.

 

La Chabola Nómada (2014-)

La Chabola Nómada surgió a principios de 2014 cuando su fundador, Iosu Zapata, decidió continuar un proyecto anterior enfocado en la arquitectura chabolista de España. Su función principal, de acuerdo con el artista, es desarrollar «intervenciones artísticas por medio de una plataforma alternativa».

Se trata de un espacio sin fines de lucro, que colabora con el grupo Recolectivo reciclaje funcional. Uno de sus objetivos más importantes es descubrir, a partir del encuentro entre el artista, la pieza y el espectador, las relaciones y experiencias que puede detonar una representación artística. Además, le interesa provocar la reflexión a partir de preguntas como ¿qué es una intervención urbana?, ¿cuáles son los límites del arte en un contexto urbano?, ¿cómo se consume el arte en la actualidad? y ¿qué es una galería de arte?

Como su nombre lo indica, La Chabola siempre está en movimiento. Aunque no cuenta con una agenda fija, anuncia por redes sociales a los artistas invitados a intervenir el espacio. «Las propuestas que acompañan a este proyecto suelen distanciarse de aquellas que se posicionan dentro de la mercantilización del arte en galerías convencionales o contextos más comerciales», añade Zapata.

Dhear, Leonardo Aranda, Joshua Jobb, Fausto Luna, Yollotl Gómez y Antonio Gritón son algunos de los artistas que han realizado intervenciones. El espacio también ha colaborado con la Galería Artspacemexico, el Polyforum Siqueiros y el Museo del Chopo.

Puedes enterarte de sus planea a futura en sus redes sociales. 

La Chabola Nómada. Tomada de su página de Facebook.

 

El Changarrito (2005-)

En 2005 el artista visual Máximo González fundó El Changarrito con el propósito de construir una plataforma alternativa donde las ideas de diferentes artistas, tanto mexicanos como extranjeros, pudieran ser expresadas en un local móvil.

Inspirado en las dinámicas del comercio prehispánico, su concepto fue el de un puesto ambulante que ofrecía alternativas de consumo artístico. El proyecto se presentó por primera vez en la feria de arte contemporáneo Arco, en España. Y, de acuerdo con González, «con el tiempo evolucionó para convertirse en una institución al servicio del arte contemporáneo».

Su naturaleza móvil le permitió desplazarse desde las principales plazas públicas y foros contemporáneos de la Ciudad de México hasta las calles que reciben a la Bienal de Venecia. Cuando lo montaban, se transformaba en un espacio público dedicado a la difusión de la cultura y la compra-venta de arte y literatura. También brindaba servicios de curadurías, exposiciones individuales y presentaciones de libros.

En 2018, para recuperar la memoria de doce años de labor, presentaron el libro-memoria  Proyecto Changarrito, con textos de artistas, curadores, investigadores e historiadores; y los registros de todas las actividades realizadas.

De acuerdo con su objetivo de estar al servicio del arte y los artistas, actualmente El Changarrito ha mutado a un programa de residencias en la colonia San Rafael.

 

Máximo González, Changarrito (2005-). Cortesía del Museo de la Ciudad de México.

—Alumnos47 Móvil (2011-2018)

En la primavera de 2011 la hoy extinta Fundación Alumnos47 (fundada por Moisés Cosío) puso en marcha una biblioteca especializada en arte contemporáneo, cuya principal característica era estar montada en una estructura arquitectónica móvil —diseñada por Productora. Su objetivo: recorría diferentes puntos de la ciudad para acercar las prácticas del arte contemporáneo al público en general.

Se trata de un espacio que congrega y atiende comunidades de aprendizaje, debate y reflexión en torno a las prácticas artísticas actuales. Todas sus actividades están pensadas en relación con el contexto donde se emplazaba el Alumnos47 Móvil. Así, la unidad móvil era acompañada por proyectos in situ de artistas, historiadores, curadores, gestores, etcétera, que diseñaban talleres, cursos, pláticas, lecturas y diversas dinámicas, siempre tomando como punto de partido el acervo bibliográfico. También desarrollaron intervenciones y proyecciones de cine y video.

Alumnos47 Móvil fue una extensión de la sede fija de la Fundación Alumnos47 , que está enfocada en el desarrollo de proyectos, la vinculación cultural y el trabajo curatorial. Además, cuenta con un acervo de publicaciones.

Alumnos47, cortesía de PRODUCTORA

 

 

 

 


[25 de febrero de 2014]

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