Era jueves. Empezaba a salir el sol. Eran las 7:19 a.m. y parecía que la tierra tenía hambre. Dos minutos más tarde, 30 mil edificios estaban por los suelos y 10 mil personas dejaron de existir; otras tantas sobrevivían bajo los escombros. Era 1985, en la ciudad reinaba el desorden y el día apenas comenzaba.

Inspirado en aquel trágico 19 de septiembre, Carlos Amorales concibió un proyecto a partir de su percepción de los sucesos ocurridos, además de darle un sentido estético a los edificios destruidos. Este trabajo también retrata la visión que tiene el autor sobre el gobierno mexicano al representarlo en relación a una ciudad totalmente colapsada y en completo caos.

Ahora, por tercera vez, el Yvon Lambert de Nueva York presenta la obra de Amorales en una exposición titulada Aftermath, una muestra que compendia este proyecto además de contar con dibujos, instalaciones y seis periódicos de ficción, tres en inglés y tres en español; algunas partes de ellos fueron recuperadas de antiguos documentos y otras dibujadas por el mismo artista, además se presentan imágenes del terremoto acompañadas de textos anarquistas. Esta exposición, abierta al público a partir del 23 de octubre, construye un discurso que parte del trabajo de Carlos Amorales con la anécdota, y se complementa con la interpretación del espectador para cuestionar las normas impuestas por el Estado en nuestra sociedad.